Si hay una palabra que identifica y caracteriza al sector de la tecnología es la palabra ‘innovación’. Una palabra que obliga a la novedad, a la mejora, a la superación propia y ajena y a casi hacer magia con cada avance que sale a la luz. El conjunto del esfuerzo de todas las compañías que trabajamos en el sector, empujados por esa locomotora...
Nos encontramos ahora al comienzo de una nueva etapa marcada por los principios de innovación, sostenibilidad y colaboración. El mundo se encuentra en pleno proceso de cambio. Y la tecnología será la que lo sustente y posibilite, como en los últimos 40 años.
Con el 70% de la población vacunada con la pauta completa en España, es tiempo de poner el foco en la crucial fase de recuperación económica en la que las TIC son claves para el impulso de la economía española como sector diferenciador y de gran valor añadido.
De unos años a esta parte la tecnología es una de las piedras angulares de la vida de particulares y empresas. En 2021 prácticamente nadie concibe la vida sin ella.
Eficiencia, productividad y personalización serán la base sobre la que se fundamente el nuevo enfoque de gestión de personas. Todo apunta a que será necesario establecer un modelo híbrido.
La contribución social de la tecnología ha sido el motor del cambio en el que seguimos inmersos. Ha logrado convertirse en un facilitador en todos los niveles, y la democratización de su uso ha hecho que se generen nuevos negocios puramente digitales.